¿Padeces de Síndrome de Intestino Irritable?

Al ser un padecimiento que se sufre de por vida, puede ser muy frustrante vivir con síndrome del intestino irritable, pues es una condición que tiene un gran impacto en el bienestar cotidiano de quien la padece.

Las medicaciones tradicionales para tratar el síndrome del intestino irritable, con frecuencia tienen incómodos efectos secundarios y otras tantas veces no son realmente efectivas.

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Por ello y de acuerdo con la regulación, nuestro medicamento no es de venta libre y solo pueden obtenerse con la prescripción de un médico.

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¿Qué es el síndrome del intestino irritable?

El síndrome del intestino irritable (SII) es una condición común que afecta el sistema digestivo. Provoca síntomas como calambres estomacales, distensión abdominal, diarrea y estreñimiento. Estos tienden a aparecer y desaparecer con el tiempo, y pueden durar días, semanas y hasta meses.

Por lo general, el síndrome del intestino irritable es una condición que se sufre de por vida. Puede ser muy frustrante vivir con él y puede tener un gran impacto en la vida cotidiana de quien lo padece.

No hay cura definitiva para esta enfermedad, pero los médicos aseguran que cambios en la dieta y algunos medicamentos a menudo pueden ayudar a controlar los síntomas.

Aunque se desconoce la causa exacta de la enfermedad, se ha relacionado con cosas como que los alimentos pasen por el intestino demasiado rápido o demasiado lento, nervios hipersensibles en el intestino, estrés y antecedentes familiares.

Tipos de SII

Los investigadores clasifican el síndrome del intestino irritable según el tipo de problemas de defecación que tenga. El tipo de SII puede afectar el tratamiento prescrito. Ciertos medicamentos solo funcionan para ciertos tipos de SII.

A menudo, las personas con SII tienen evacuaciones intestinales normales algunos días y anormales otros días. El tipo de SII que se padezca se diagnosticará dependiendo de las deposiciones anormales que se experimenten:

• SII con estreñimiento: La mayor parte de las heces son duras y grumosas.
• SII con diarrea: la mayor parte de las heces están sueltas y acuosas.
• SII con hábitos intestinales mixtos: se caracteriza por evacuaciones duras y grumosas y evacuaciones blandas y acuosas que se producen en lapsos cortos de tiempo, usualmente el mismo día.

Síntomas del SII

En las personas con SII, el músculo del colon tiende a contraerse más que en las personas sin la afección. Estas contracciones provocan calambres y dolor. Las personas con SII también tienden a tener una menor tolerancia al dolor. La investigación también ha sugerido que las personas con SII pueden tener un exceso de bacterias en el tracto gastrointestinal, lo que contribuye a los síntomas.

Otros nombres que se le dan al síndrome del intestino irritable, son: colon irritable; colon espástico; y estómago nervioso, ya que los síntomas a menudo ocurren cuando se siente estrés emocional, tensión y ansiedad.

Los síntomas del SII incluyen:

• Dolor o calambres abdominales, generalmente en la mitad inferior del abdomen.
• Hinchazón.
• Evacuaciones intestinales que son más duras o sueltas de lo normal.
• Diarrea, estreñimiento o alternando entre los dos.
• Exceso de gases estomacales.
• Mucosidad en las heces, que pueden llegar a verse blanquecinas.

Consulta con tu médico si tienes síntomas más de tres veces al mes durante más de tres meses. Y si tienes síntomas con menos frecuencia, pero interfieren con su vida, también es una buena idea hablar con tu doctor.

Algunos síntomas pueden indicar un problema más grave. Comunícate con tu médico lo antes posible si tienes sangrado, fiebre, pérdida de peso o dolor severo.

Las personas con SII a menudo tienen otros problemas de salud, incluidos:

• Ciertas afecciones que involucran dolor crónico, como fibromialgia, síndrome de fatiga crónica y dolor pélvico crónico.
• Ciertas enfermedades digestivas, como la dispepsia y la enfermedad por reflujo gastroesofágico
• Ciertos trastornos mentales, como ansiedad, depresión y trastorno de síntomas somáticos.

Causas y desencadenantes del SII

Si tienes SII, es posible que hayas notado que ciertas cosas desencadenan síntomas. Los desencadenantes comunes incluyen algunos alimentos y medicamentos. El estrés emocional también puede ser un desencadenante. Algunos investigadores sugieren que el SII es la respuesta del intestino a los factores estresantes de la vida.

Los investigadores no saben exactamente qué causa el SII, pero piensan que una combinación de factores puede conducir a padecer la enfermedad. Entre estos factores están:

• Dismotilidad: problemas con la forma en que los músculos gastrointestinales se contraen y mueven los alimentos a través del tracto digestivo.

• Hipersensibilidad visceral: nervios extrasensibles en el tracto gastrointestinal.
• Disfunción cerebro-intestino: falta de comunicación entre los nervios en el cerebro y el intestino.

Factores de riesgo de síndrome inflamatorio instestinal

La afección ocurre con mayor frecuencia en personas entre los últimos años de la adolescencia y a los 40 años. Las personas menores de 50 años tienen más probabilidades de desarrollar SII que las personas mayores de 50 años. Las mujeres pueden tener el doble de probabilidades que los hombres de padecer SII y puede ocurrirle a varios miembros de la familia.

Puede tener mayor riesgo si tienes antecedentes familiares de SII; estrés emocional, tensión o ansiedad; intolerancia a ciertos tipos de comida; historial de abuso físico o sexual; infección severa del tracto digestivo.

Las mujeres con SII pueden encontrar que los síntomas se intensifican durante sus períodos menstruales.

Estos síntomas a menudo ocurren repetidamente, lo que puede hacer que el afectado se sientan estresado o molesto, lo que puede agravar la condición por razones emocionales. Los médicos recomiendan aprender técnicas de manejo de las crisis para controlar los episodios de irritabilidad, lo que hará que el afectado comience a sentirse mejor, física y mentalmente.

Diagnóstico y pruebas

Si has tenido síntomas gastrointestinales incómodos, debes consultar con un médico especialista, es decir, un gastroenterólogo. El primer paso para diagnosticar el SII es un historial médico y un examen físico. Tu médico te preguntará acerca de tus síntomas:

• ¿Tienes dolor relacionado con las deposiciones?
• ¿Notas un cambio en la frecuencia con la que defecas?
• ¿Ha habido algún cambio en el aspecto de tus heces?
• ¿Con qué frecuencia tienes síntomas?
• ¿Cuándo comenzaron tus síntomas?
• ¿Qué medicamentos tomas?
• ¿Has estado enfermo o has tenido un evento estresante en tu vida recientemente?

Dependiendo de tus síntomas, es posible que necesites otras pruebas para confirmar un diagnóstico. Los análisis de sangre, las muestras de heces y las radiografías, pueden ayudar a descartar otras enfermedades que simulan el SII.

Dependiendo de tus síntomas, historial médico y otros factores, tu médico puede recomendarte una sigmoidoscopia flexible o una colonoscopia para examinar tu colon con más detalle. Estos dos procedimientos ambulatorios son similares. La diferencia es que una sigmoidoscopia examina solo la mitad inferior del colon y una colonoscopia examina todo el colon.

Cuándo ver a un gastroenterólogo

Si tiene síntomas del SII, primero habla con tu médico de cabecera, quien determinará si debe referirte a un gastroenterólogo.

Un gastroenterólogo es un médico que se especializa en diagnosticar y tratar enfermedades del sistema digestivo, que incluyen: SII; cáncer colorrectal; enfermedad del hígado; trastornos de la deglución y del esófago; trastornos del páncreas.

Tratamientos paliativos tradicionales

Ninguna terapia específica funciona para todos los casos, pero la mayoría de las personas con SII pueden encontrar un tratamiento que funcione para ellos. Tu médico personalizará tu plan de tratamiento según tus necesidades. Las opciones típicas de tratamiento incluyen cambios en la dieta y el estilo de vida. Un dietista puede ayudarte a crear una dieta que se adapte a tu estilo de vida.

Muchas personas encuentran que con estos cambios, los síntomas mejoran:

Cambios en la dieta

• Aumenta la fibra en tu dieta: come más frutas, verduras, granos y nueces.
• Agrega fibra suplementaria a tu dieta, como cereales.
• Bebe mucha agua: ocho vasos de 8 onzas al día.
• Evita la cafeína (del café, chocolate, té y refrescos).
• Limita la ingesta de queso y leche. La intolerancia a la lactosa es más común en personas con SII. Asegúrate de obtener calcio de otras fuentes, como brócoli, espinacas, salmón o suplementos.
• Prueba un plan de alimentación diseñado por un nutricionista que conozca tu cuadro específico y que pueda ayudar a mejorar los síntomas.

Cambios de actividad

• Hacer ejercicio regularmente.
• No fumar.
• Probar técnicas de relajación.
• Hacer comidas más pequeñas con más frecuencia.
• Registrar los alimentos que comes para que puedas averiguar qué alimentos desencadenan los brotes del SII. Los desencadenantes comunes son los pimientos rojos, las cebollas verdes, el vino tinto, el trigo y la leche de vaca.

Cambios médicos

• Tu proveedor puede recetarte medicamentos antidepresivos si tienes depresión y ansiedad junto con dolor abdominal significativo.

• Otros medicamentos pueden ayudar con la diarrea, el estreñimiento o el dolor abdominal.

• Los probióticos pueden ser una opción para ti. Estas “buenas bacterias” pueden ayudar a mejorar los síntomas.

• Habla con tu médico si tus síntomas no mejoran. Es posible que necesites más pruebas para ver si una afección subyacente está causando los síntomas.

Si los medicamentos no funcionan

En algunos casos, los síntomas no responden al tratamiento médico. Tu doctor puede referirte a terapias de salud mental. Algunos pacientes encuentran alivio a través de la Terapia conductual cognitiva (TCC); la Hipnoterapia y la Biorretroalimentación.

Lamentablemente y dado que no existe una causa conocida para el SII, no es una afección que pueda prevenirse ni evitarse. Si tienes SII, puedes intentar evitar que los síntomas se agraven evitando los desencadenantes.

Cannabidiol (CBD) como tratamiento de primera línea para el síndrome de intestino irritable

El cannabidiol (CBD) es un compuesto natural de la planta de cannabis que está ganando popularidad como remedio para diversos problemas de salud. La investigación sugiere que el CBD se muestra prometedor en el manejo de los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII).

Aunque la investigación aún se encuentra en las primeras etapas, las personas utilizan cada vez más el CBD como tratamiento para una variedad de afecciones de salud, incluido el SII.

El CBD es uno de los alrededor de 540 fitoquímicos que se encuentran en la planta Cannabis. La investigación sugiere que puede ayudar a tratar el dolor y la inflamación, que son síntomas comunes del SII.

Si bien una dieta adecuada para el SII y el alivio del estrés pueden ayudar a reducir los síntomas del SII, es posible que algunas personas deseen probar tratamientos adicionales, especialmente durante los brotes.

Debido a que hay receptores de cannabinoides en todo nuestro cuerpo, incluidos nuestros estómagos, es posible que la ingesta de productos derivados del cannabis, como el CBD, pueda ayudar con los síntomas digestivos.

Aquellos que deseen usar cannabis medicinal deben discutir los riesgos y beneficios con más detalle con su médico y asegurarse de obtener sus medicamentos legalmente y de producción confiable.

Al final del día, tu malestar es tu propia experiencia y la forma en que eliges manejar tu condición es una elección personal. Si bien la ciencia del cannabis medicinal para el alivio del SII es nueva y está en franca evolución, su uso histórico es más tradicional de lo que la mayoría de la gente cree. Cualquiera que sea tu elección, debe tratarse de que te ayude a vivir una vida más feliz, saludable y sin molestias. Y en esa búsqueda de apoyarte, entran las formulaciones farmacéuticas de Klean-Med.

Investigaciones científicas acerca del CBD para tratar el SII

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